Hoy sin pretenderlo he tenido mi primera entrevista de trabajo como artista en una galería. Todo sucedió al llevar mi humilde dossier en un a4 con tres obras mías a la galería que conocí hará unas semanas donde buscaban artistas de todo tipo. Tras recibirme la secretaria del sitio me contó que ya no buscaban mas. Estaba ya marchándome cuando un hombre que trabaja allí me hablo y me invito a hablar con él. Me conto a cerca de la galeria, que el promovia a artistas jovenes y experimentados, me preguntó un poco sobre mí, analizó mis obras y bueno... Criticó que no eran malas pero tampoco excepcionales, sobre todo en tema de color, pero me dijo que sabia crear imágenes algo que al parecer no todo el mundo sabe hacer. Me gusto que alguien experto las valorase y criticase, por que así se aprende. Pero tras estar en la galería y tras las criticas de este hombre (que para nada fueron en un tono malvado) me siento como si fuera un niño pequeño que dibujase. También es cierto que este hombre parecía un experto en "manchas" cosa que para nada es mi campo, lo mio es la figuración, pero me ha hecho dudar un poco sobre mi talento. Quizás no sea tan artista como yo piense, quizás este fuera de sitio en el mundo del arte. He de añadir que yo tampoco me siento vinculado al arte contemporáneo, el cual me parece obsoleto totalmente.
Otro momento destacable de esta semana fue que este miércoles, volví a sentarme con mi laúd en el aula de música de mi antiguo colegio, bajo la tutela de mi gran maestra y amiga Sor Isabel. Cuando fui a visitarla por su cumple en abril me convenció para que tocase en la misa de Mª Auxiliadora (24 de mayo) y no pude negarme. Fue raro volver a ese mismo sitio donde pase 10 años desde 3º de primaria, tocando en la rondalla de la escuela, me hizo sentirme vivo de nuevo, y para mayor sorpresa otra de las también veteranas (de laúd también) apareció para tocar. Fue bastante emotivo recordar los viejos tiempos y ver como aunque pase el tiempo las cosas siguen en el corazon guardadas, y como una gran persona como es Sor Isabel consigue mover a las personas usando la fuerza del cariño y del respeto que ella nos ha ganado.
Mañana por la tarde volveré a tocar el "Rendidos a tus plantas", vuelve a salirme el callo en la yema de los dedos.
He visto de una orquesta popular no muy lejana de donde yo vivo en la cual también hay laúd y bandurrias, quizás me apunte por un tiempo.
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